De La Auto-Hipnosis Para Conquistar Metas

Yo soy fiel creyente de que la psicología no es tan compleja como la hacen ver y que solo expertos tienen la capacidad de interpretar nuesta forma de ser para encaminarnos en el camino correcto. Yo pienso que no hay mejor psicólogo que uno mismo. Es cuestión de darse la oportunidad de analizarse uno mismo. Buscar en los recovecos de la mente y darse la oportunidad de escuchar lo que nos tenemos que decir.

La auto-psicología también podría verse como una especie de auto-hipnosis, siempre y cuando se tenga cuidado y se tenga claro lo que se desea hacer. Si que hay muchos libros de como caer en trances y como llegar a hipnotizarse en 10 pasos. Lo más importante es creer en lo que se esta haciendo y concentrarse arduamente (tan arduo como se pueda).

Yo por mi parte siempre he sido un tipo tímido con las mujeres y no soy el más versado en mis ventitantos años de vida cuando las tengo de frente. Una noche decidí autoanalizarme y tratar de inducir en mi un patrón diferente al tradicional. Una amiga me invitó a salir con ella y con su amiga y aunque no tenía interés directo en ella y a la otra no la conocía me dije que esta noche sería diferente. Esta noche sería quien debía ser.

Me acosté en mi cama, con la luz apagada y el cuarto en el aftermath de un aire acondicionado recien apagado. Estuve unos segundos estirándome, y tratando de dejar mi mente en blanco lo más posible. Luego comencé a contar hacia atras desde veinte. Entre cada número respiraba, y me decía ó me programaba que no había nada a que temer, que yo podía ser yo mismo, que no tenía porque estar nervioso. Ese proceso duró casi quince minutos. Al terminar, me vestí y salí. No les voy a decir que sentí la diferencia, que me sentía el más super hombre, porque no fue así. Me sentía igual, como si hubiese perdido mi tiempo.

En eso llegó mi amiga y su amiga, nos sentamos a hablar y aunque yo la conocía nunca había compartido con ella así, menos con la otra. Para mi sorpresa, no estaba nervioso, y las tenía riéndose de cada comentario que hacía. Su amiga y yo empezamos hasta intercambiar miradas. Y a resumidas cuentas la noche fue un éxito. La pase fenomenal, bailamos, bebimos, relajamos y hablamos y me sentía increiblemente. Con decir que he seguido saliendo con la amiga de mi amiga. Pero de eso hablaré luego, ya que las sincronicidades que he tenido con ella merecen un tema propio.

A resumidas cuentas, la auto-hipnosis es una buena herramienta, siempre y cuando se quiera y se crea lo que se hace. Es como realmente convencer a tu subconciente de que tu eres. La mente es más poderosa de lo que le damos crédito a veces. No es toda intocable. Al contrario, esta ahí lista para que le usemos a plenitud.